sábado, 20 de octubre de 2007


Ismael... Je... Hablar de él lo considero hablar de mi luz en la oscuridad... Aunque ahora represente mucho más para mí...

Todo empezó un campamento cuando yo tenía 12 años, en el paso de 6º de primaria a 1º de secundaria. Nos llevaron a Carrión de los Condes, no me acuerdo ya en qué provincia estaba. Teníamos una sala de juegos de mesa y cartas, enormes canchas de fútbol y baloncesto y una piscina. En casa solamente jugaba al ajedrez con mi padre, y cuando mis padres se separaron, me quedé sin compañero de juegos. Por entonces él era un completo desconocido para mí solamente un chico con quien había compartido los primeros cursos de infantil. No lo recuerdo muy bien, pero sé que estaba jugando al ajedrez. Yo añoraba muchísimo ese juego, aunque no se me diera muy bien, y entonces me acerqué a él y el pregunte: ¿Quieres jugar al ajedrez conmigo? y el contestó: Vale...

Nada volvió a ser lo mismo.

Ya en 1º...Nunca me di cuenta de ello, pero cuando lo supe, fue demasiado tarde...Él me quería...Y ahora, cada vez que lo recuerdo, mi corazón llora por haber sido tan estúpido de no haberse dado cuenta...Aunque ni yo misma me diera cuenta de mi propio sentimiento hasta el 20 de Enero del año siguiente...Demasiado tarde...

miércoles, 17 de octubre de 2007

Una pequeña presentacion


Mi nombre es Andrea, y tengo 15 años...aunque lo que considero de más importancia es la edad, más que el nombre...El nombre es importante sólo si le encuentras un significado. Nó sé que esperaban mis padres de mí al llamarme algo que significa "viril". Cuando era más pequeña, a veces, intentaba hacerme la "marimacho" en un intento de hacerme más dura de lo que en realidad soy, aunque, en realidad siempre he sido bastante burra...
Pero, en el fondo...Nunca he dejado de ser esa personíta tímida que nunca hablaba cuando todos estaban alegremente charlando en corro. La verdad, no sé si alguna vez me llegaron a aceptar. Yo tomé la iniciativa, y ya a la temparana edad de 10 años me quedé sola, a pensar...Sobre cualquier asunto, o veía como otros niños jugaban al balón prisionero, sin más, esperando la hora de volver a clase...
Nunca quise ir con la gente...Hasta que conocí a Ismael...